pdP #5

Rouvière, H., Delmas, A., Delmas, V.; Anatomía humana. Descriptiva, topográfica y funcional; Barcelona, Masson, 2006, Tomo II.

¿Alguien me explica qué aporta desde el punto de vista académico el hecho de saber que el fiambre cuyo hígado sirvió de modelo en la figura 280 fue ajusticiado (clickear en la figura para ampliarla)? ¿Eh???

Sí, sí, ya sé, yo voy a tener la culpa de que después vayan cantando por ahí kaksi tapaa harrastaa seksiä.



Y con esto prometo aflojar con Youtube. Al menos por un tiempo.

And in the land where I grew up, into the bosom of technology, I kept my feelings to myself until the perfect moment comes.

Then into your bloodstream I will go until I turn into a part of you flooding the garden of delights. That was a long long time ago, that was a long long time ago.

It's not the ending of the world, it's only the closing of a discotheque I used to go three times a week, but that was a long long time ago. Yeah, that was a long long time ago.

And that roaring that you hear is only the blood that circles constantly. No, it is not applause my dear, that was a long long time ago. That was a long long time ago.

In between stations I can hear a million possibilities, it's only the singing of the stars that burned out a long long time ago, they burned out a long long time ago.

David Byrne, A long time ago, davidbyrne, 1994.

Fuck! It´s all fucked up, and I bloody fucked up it all, as always.

And this could be the soundtrack.

Ayer estuve pensando en que las dos piezas de lenguaje que más utilizo son las siguientes:

no necesariamente

y

¿en qué sentido?

y no sé, es como que estoy un poco alarmado. Muy alarmado. Mátenme.

Nada que ver con nada: este sábado voy a escuchar a esta gente, a ver qué onda en vivo, y nuestra querida P. también será de la partida. Lo digo como aviso para sus numerosos admiradores, que en los últimos tiempos se han multiplicado exponencialmente gracias a sus apariciones en lo de Angus. Un solo pedido: por favor eviten las aglomeraciones. Gracias. De nada.

fact #3

El 95% de los hombres que conducen automotores se introduce el dedo en la nariz cuando frena ante un semáforo en rojo*. Lo hacen para que podamos utilizar ese hecho como ejemplo a fin de explicar la diferencia entre hábito y regla.

* Pero hoy vi haciendo eso a una mujer.

Estimado Cuti,

Recién llegado de Nueva York, donde participé del simposio "Ataxia Emocional en Adultos Mayores" (y del lanzamiento de la XBox III), me encuentro con la cordial invitación para participar de su blog en calidad de consultor. A pesar de haber cerrado mi consultorio virtual hace tiempo –el éxito del mismo y la multiplicación de pacientes en horarios de madrugada me impedían conciliar el sueño y me obligaban a contestar una y otra vez las mismas pavadas- mi devoción por la psique humana y la ciencia del corazón han sido más fuertes, y es con sumo agrado que he decidido aceptar su propuesta.

Invito entonces a sus lectores a que me envíen cualquier tipo de consulta sobre conflictos amorosos, sexuales, o del orden de los sentimientos en general, por este medio o a la dirección de que dispongo para tal fin: llamando.al.dr.amor@gmail.com. Tales consultas serán respondidas en su blog, en la medida en que mis ocupaciones así me lo permitan, de manera individual o en forma de abstract en caso de que aborden una problemática común.

Confío en que a través de mi ciencia y conocimientos pueda al menos aportar un poco del alivio, consuelo, ayuda y sosiego que tantas almas, solitarias o no, parecen necesitar en estas épocas. Para ponernos en tema le transcribo una de las últimas consultas que hube de responder antes de partir, como le dije, al mencionado simposio.

Suyo,

Dr. Amigo Amor
Licenciatario en Psicología

ML de Floresta dice:
Soy divorciada, tengo una nena de 4 años, manejo mi propia empresa y vivo con mi hija y mi mamá jubilada. Hace más de un año que salgo con un tipo con el que la pasamos bárbaro en su departamento. Hasta ahora todo bien, pero desde hace unos meses siento que me pasa algo extraño. Reconozco que estoy hasta las manos –aunque yo no soy de enamorarme fácil, eh– y le pregunté qué sentía por mí. Le dije que quería saber si me amaba o no y él no me contesta ni una cosa ni la otra. La última vez que le pregunté me dijo "¿te venís a vivir conmigo?", "ni en pedo" le contesté. "Entonces no me rompas las pelotas", dijo. Y se sentó en el futón a ver un partido de basket de la NBA. Estoy desorientada ¿cómo puedo saber si está enamorado de mí o no?

Dr. Amor dice:
Cuando ud. contesta "ni en pedo", es muy evidente lo que quiere decir. "Pedo" equivale a "gas", "aire que se expele", es decir algo que se saca afuera, que estalla o explota, con o sin ruido. Ud. busca una situación que explote o estalle para poder finalmente darle "gas", es decir dedicarse exclusivamente al acto sexual. La respuesta de él –"no me rompas las pelotas"- habla a las claras de su deseo de que no le cuestionen el lugar del falo y de dueño de la cueva primitiva. Al mismo tiempo le pide que tengan relaciones sexuales más espaciadas porque la frecuencia actual le está afectando los genitales provocándole dolor –la fantasía de él es que se le "rompan". Es un claro pedido de ayuda. Ud. quiere aire, gas, y él quiere mantener sus gónadas enteras. Por eso se sienta luego a ver un partido de basket –deporte que consiste en hacer pasar una pelota a través de un aro (la imaginería freudiana es aquí transparente)– para reafirmar su condición masculina, amenazada por sus continuos reclamos.
Consejo: espacie el fornicio y preste atención a Kobe Bryant.

maestro III

No podía faltar en mi santísima trinidad de la animación*. Hubiera preferido "The wrong trousers" pero es demasiado larga para ponerla acá. Igual en DVD se consigue casi todo.



* Costó dejar afuera a gente como Adam Elliot, Sylvain Chomet, Tomek Bagiński, Studio Blur, etc. Check them out.

Sí, ya sé, mucho videíto últimamente, pero es que quiero aprovechar Youtube mientras exista.

J'suis snob... foutrement snob



Lalala, Ah! Si j'avais un franc cinquante, Boris Vian.

-Cada vez que se me ocurra un comment por un post tuyo te voy a escribir un meil aburrido y de cotillón como éste sólo para decirte, no lo olvides, yo soy tu proveedora de drogas... ahg, lo que pasa es que siempre que escribo 'no lo olvides' como reflejo condicionado pavloviano, y luego skinneriano porque ya es operante, tengo que escribir 'yo soy tu proveedora de drogas' y ahora, claro, ya me olvidé qué era lo que no debías olvidar, ojo, esto no es un recurso retórico circular y pelotudo, me olvidé en serio.

-Pero ¿sos mi proveedora de drogas o no?

planet earth is blue and there's nothing I can do

Estoy en una órbita geoestacionaria, a 35.900 kilómetros (metros más, metros menos) del ser humano más cercano. Desde acá se los ve chiquitos pero se los escucha fuerte y claro.

Disculpame que no baje pero es que tengo miedo de caer en un cinturón de Van Allen, ¿viste?

azar II

Esta historia comenzó hace mucho tiempo pero sólo recientemente tomé conciencia de ella. A raíz de la situación que referiré al final, P. me recordó que el dinero con el que compré a Olga* lo gané en una rifa organizada por las alumnas de una reconocida escuela de educación artística del Oeste del Gran Buenos Aires. Eso me trajo a la memoria que tiempo después, cuando tuve que viajar de Paris a Londres, elegí hacerlo con el Eurostar (porque si me iban a romper el orto que lo hicieran con style), pero como partió con 20 minutos de retraso gané el pasaje de vuelta gratuito. Finalmente el círculo se cerró hace una semana, en el Centro de Distribución de Oca en San Telmo, cuando fui a buscar mi premio de la promoción Nescafé Dolca: tres tarros de 170 gramos de café instantáneo, tres latas de café con leche y azucar, tres cajas de capuccino y una cantidad indeterminada de cubitos de telgopor de alta densidad de 2 centímetros de lado. Y una caja de cartón.

Mi suerte está en irreversible decadencia.

* No es una esclava sexual rusa de ojos azules y grandes tetas sino mi Ibanez Roadstar II de 1984.

cuti x dentro: cxd #1

En ©utipaste siempre estamos trabajando para mejorar nuestro servicio, y es por eso que hoy tenemos el orgullo de presentar una nueva sección denominada cuti x dentro. En ella nuestros visitantes podrán inquirir a través de los comentarios que se habilitarán especialmente para tal fin, por todo aquello que deseen conocer acerca de la vida, obras, milagros, cavilaciones y cogitaciones, etc., de nuestro querido amiguito. Cuti elegirá arbitrariamente las preguntas que se le antojen y las responderá* cuando le venga en gana, en un nuevo post, en cuyos comentarios nuestros visitantes podrán preguntar... bueno, se entendió. Vamos entonces a la primera pregunta.

Pregunta: ¿Cómo puedo darme cuenta si le gusto a cuti? (Confundida de Barrio Norte)
Respuesta: Es tan fácil darse cuenta de eso que más que confundida Ud. debe ser opa. Una señal inequívoca -entre otras- es que si por ejemplo se lo cruza en un pasillo y lo nota duro e incómodo, si apenas le dice "hola" y huye rápidamente antes de saludarla con un beso, entonces Ud. le gusta: claramente está pensando en las ganas que tiene de partirle la boca, cosa que por supuesto no hará. Sepa también que el grado de incomodidad que Ud. note es directamente proporcional a la atracción que ejerza sobre cuti. De nada.

* Cuti advierte que las respuestas podrán ser, según se le canten los gobelinos, verídicas, verosímiles o versiformes (i.e. ficticias), en proporciones variables y caprichosas**. De cualquier modo, confiamos en que será posible distinguir la paja del trigo y más aún, deducir el trigo de la paja.

** Y eso porque tenía ganas de emular y citar a cualquier boludo: "el contenido de est[a respuesta] es tan ficticio como real, y tú, simple lector, nunca sabrás a qué mitad pertenece lo que estas leyendo. Oh, me siento tan superior."

¿Cuántas veces podés escuchar un mismo disco sin cansarte o llegar a odiarlo?*

Fué amor a primera escucha (no recuerdo el año, ponele mediados de los noventa).

Y miren que ha pasado música por estos oídos en todos estos años.

"Alone" de Bill Evans sigue siendo EL disco que conservaría si me dijeran que tengo que quedarme con UNO solo por el resto de mi vida.

Qué fuerte, es lo más estable e inamovible que registro en materia de elecciones afectivas en mi vida.

* pdP #4.

Era como caminar entre Haedo y Ramos un día de peregrinación a Luján. Pero no por Rivadavia sino Unter den Linden, hacia el Oeste, a contrapelo de la gente que volvía a la Brandenburger Tor, hasta la parada del tranvía que me dejaría en Alexanderplatz. No sé por qué quería ir; el nombre sólo me resonaba por esa miniserie de Fassbinder que jamás había visto.

(Tuve varios de esos "ataques simbólicos" -por llamarlos de alguna manera- en Berlin. Por ejemplo escuchar "Zoo Station" de U2 parado en el enorme hall de la Bahnhof Zoo, o ir a la Siegessäule sólo por "Las alas del deseo". Supongo que para amigarme con esa ciudad de otro modo tan dura.)

Al final tomé el tranvía, algo innecesario y tonto pues Alexanderplatz quedaba a pocas cuadras; conclusión: mientras me acomodaba inevitablemente seguí de largo. Pero cuando me di cuenta no me importó: no tenía apuro alguno y perderme en tranvía por la ciudad no estaba nada mal.

A medida que me internaba en lo que una vez se llamó Berlin Oriental todo fue cambiando. Alguien hubiera dicho que me estaba enfrentando a la arquitectura socialista; yo veía más bien un paisaje similar al de la zona de monoblocks que está por Ruta 4 y Crovara, frente al ex-Regimiento de La Tablada. Hasta la gente era parecida.

Al rato me pareció prudente volver, era casi de noche y empezaba a hacer frío. Después de cuarenta minutos de esperar el puto tranvía ya sudaba de los nervios, pero por otra parte el entorno me resultaba en cierto modo tan familiar que no me sorprendí cuando se me acercó este pibe de quince, dieciséis años, que me abrazó como si fuéramos amigos de toda la vida y me dijo que le diera todo lo que tenía encima o me cortaba, vieja. Quise gritar y no pude y la gente en la parada mirando al pibe que me choreaba y a mí boqueando, hasta que por suerte apareció el 630 y como pude me zafé y salté y le dije al chofer que me llevara que no tenía un mango mientras pasaban desdibujadas las cuadras del Camino de Cintura y el bondi me llevaba a cualquier lugar a cualquier lado.

Espero que esta vez sea cierto.

(No sé, pero para mí la suma Caoz + Terry Jones + Björk + Damon Albarn + Julian Nott + The Brodsky Quartet es más que promisoria.)

No pienso disculparme, no tengo por qué. Me importa un carajo que sigan creyendo que no los invité y que estén enojados y que no escriban y toda la bola. Les expliqué mil veces que los tipos decían que había que confirmar el viaje dentro de las 72 horas de otorgado el premio. Y yo les mandé mails, los llamé, y nadie me dio pelota. Me hubiera gustado que vinieran. Incluso podrían haber venido con sus novios, esposos, amantes, perros, hijos, whatever: al final sólo usé 1 de los 30 pasajes que me dieron. Ustedes saben, amigos, lo que se llama amigos, uno tiene pocos. Y si hubieran venido habríamos hecho algo así como un segundo viaje de egresados. Ya sé que suena un poco deprimente, pero por otro lado doy fe de que el barco era realmente grande, y si alguno se aburría o enculaba había lugar a patadas para estar días enteros sin cruzarnos (Pato, vos sabés de qué hablo). Además, el barco estaba hasta las manos. Bueno, no es que no se pudiera caminar, no era como el Sarmiento a las 7:30. Pero, por poner un ejemplo, si querías conseguir un lugar en el cine tenías que ir como dos horas antes. Y no es que las películas fueran buenas; no, eran más bien un sorete y medio. Pero era eso o la pileta o el minigolf o la pileta o el bar o el minigolf o la pileta o el teatro (verdaderamente insufrible) o la pileta o escuchar a esos negros flacos altos vestidos con uniforme cuasimilitar que tocaban versiones espantosas de cosas que en algún momento fueron tangos o bosanovas, qué se yo. O pericones o valses, todo era una masa irreconocible. Y era todo eso o la pileta o lo demás o la pileta. Así que, como les decía, la hubiéramos pasado bien.

("Vladimir & The Putins": así se llamaba la banda de los negros. Cómo se la perdieron... Encima, (y esto probablemente explique el nombre que eligieron) más de una vez los ví "fraternizando" entre sí y/o con algún pasajero medio afrancesado. Cada vez que veía ese espectáculo vomitaba hasta el apellido. Pero ojo, no por homofóbico o algo así; no, si yo tengo un amigo puto. En realidad vomitaba todos los días. La comida y el zarandeo.)

Seguro que van a decir menos mal que no fuimos, el viaje ese fue una cagada. Y nada que ver loco; yo la pasé bien. Después si quieren les cuento con más detalle, y si no quieren se van a la mierda, yo les cuento igual.

¿Cuánto?

¿Quién decidió que se debe escribir sólo cuando se tiene algo que decir? El arte consiste precisamente en no escribir lo que se tiene que decir sino algo completamente imprevisto.

Witold Gombrowicz, Diario argentino, Editorial Sudamericana, Buenos Aires, 1968; p. 69.

Sólo lamento que haya utilizado la palabra "arte". Cada vez que me topo con ella (y, en menor medida, con "escritor", "músico", "dramaturgo", etc.*) sí, me dan ganas de desenfundar el revólver.

* Antes de que me pregunten, decir "filósofo" no me enoja: me avergüenza. Yo creo que es peor.